La responsabilidad social empresarial (RSE) se asocia con el compromiso adquirido por empresas dedicadas generalmente a la consecución de fines económicos o comerciales de buscar el mejoramiento social, económico y ambiental, impulsando acciones, de acuerdo a las tendencias actuales, que van desde el uso de energías verdes, la transparencia y la sostenibilidad, hasta generar un impacto positivo en las comunidades.
Hoy en día, la forma de hacer negocios ha cambiado y quienes dirigen empresas deben manejar nuevos conceptos, ideas, formas de trabajar y de mejorar la gestión interna contribuyendo con la sociedad, y esa contribución debe ir más allá del simple altruismo.
Por ello, se hace fundamental para el liderazgo de las empresas, estar al tanto de las últimas tendencias en RSE y actuar en consecuencia, esencialmente para que las empresas se adapten a la situación actual y se preparen para el futuro.
5 tendencias actuales en Responsabilidad Social
El 2022 apunta a ser el año que tanto las administraciones como las entidades privadas asuman y materialicen su liderazgo, con acciones eficaces que garanticen un futuro basado en valores de igualdad e integración, justicia, resiliencia y políticas ambientales.
Las cinco tendencias de RSE que impulsan el mundo hoy en día están planteadas para:
- Mejorar la producción.
- Generar ingresos.
- Levantar la reputación y credibilidad de las empresas.
- Ser más amigables con el medio ambiente.
- Contribuir con el mejoramiento de la sociedad y su crecimiento económico.
1. Sostenibilidad
Junto con el respeto al medio ambiente, son objetivos que forman parte de la RSE y están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas, alcanzando cada vez mayor relevancia. Ante esto, las empresas se enfrentan al desafío de crear estrategias de responsabilidad social alineadas con el modelo de negocio.
2. Transparencia
Existe un gran interés por parte de la sociedad en la información no financiera corporativa. La información sobre sostenibilidad ha pasado a ser un imperativo en el mundo empresarial, al igual que la información financiera y no financiera. Este tipo de información debe ser fidedigna, verificable y cuantitativa sobre su impacto, para que los grupos de interés puedan hacer sus valoraciones según datos reales.
Actualmente, una de las tendencias es que las personas quieren conocer más de las empresas, de sus políticas, certificaciones y compromisos, por lo que rendir cuentas resulta vital para dar a conocer sus prácticas. Con mayor resistencia, las empresas familiares y las públicas suelen tener un poco más de temor a la hora de publicar su información. Sin embargo, este tipo de acciones aumentarían la confianza de los consumidores, colaboradores e inversionistas en las comunidades y países donde opera.

3. Salud
El nuevo concepto de salud tiene un sentido amplio, entre las tendencias en salud se incluyen las enfermedades profesionales junto con la salud física, la nutrición, la parte emocional, etc. Integrar la promoción de la salud en la cultura corporativa tiene sus ventajas, como:
- La mejora de la productividad y del clima laboral.
- El descenso del absentismo.
- La mayor motivación.
- La mejora de la imagen, entre otros.
En este escenario destacan los programas y sistemas de gestión de organización saludable, incluyendo el bienestar psicológico de los empleados.
4. Integración y diversidad
La contratación de personal atiende criterios intergeneracionales y de igualdad de oportunidades. Otro elemento a tener en cuenta es la erradicación de la brecha salarial entre hombres y mujeres. También se fomenta la incorporación de personas con discapacidades.
5. Alianzas públicas – privadas
Esta es una de las tendencias que se ha convertido en una necesidad básica para lograr celeridad y eficiencia en diversos proyectos. El gran objetivo de estas asociaciones son los beneficios que brindará para la iniciativa privada y la sociedad. Las alianzas estratégicas y financieras buscan aumentar el valor social y empresarial, generando sinergias y foros colaborativos.
Estas alianzas son muy importantes para el progreso de proyectos que permitan el desarrollo y crecimiento de los países; por separado ninguna de estas entidades puede arreglarlo todo por si solos, pero unidos pueden hacer grandes cosas. En el caso de las empresas, deben empezar por casa, mejorando sus procesos y su gestión, para luego expandir su área de colaboración y encontrar los aliados correctos, además de mucha madurez al establecerlas. Unir esfuerzos hace posible mejores oportunidades de desarrollo y un medio para alcanzarlas.

Yammine: De la filantropía a la sostenibilidad ambiental
Anteriormente, una de las tendencias de la responsabilidad social empresarial se centraba en acciones de filantropía o beneficencia; esto ha evolucionado con el tiempo, y las empresas deben realizar acciones más integrales que pueden empezar en su estructura interna, generando un cambio que luego impacte también en la sociedad.
Las nuevas tendencias de RSE indican que para contribuir socialmente las compañías deben identificar un proyecto social al que puedan ayudar, pero desde la razón de ser de la empresa. Además, las empresas deben trabajar en corregir los impactos que se causan o se puedan causar al medio ambiente, de lo contrario su rentabilidad económica se verá afectada.
Si se implementan estrategias de largo plazo que permitan mejorar los impactos, contribuyan al desarrollo de los grupos de interés, desde lo interno, pasando por proveedores, consumidores y la comunidad, los beneficios se harán sentir.
También, esto viene a cerrar las grietas de pobreza y discriminación de género, a través de la creación de empleos dignos y decentes, además de contribuir con el Estado en el pago de impuestos que permitan un mejor desarrollo del país; las empresas están desarrollando bienes y servicios que mejoren la calidad de vida de las personas.